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D.L. J-309-2005 ISSN 1699-6151 |
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Balance*
Cuando llegues al epílogo del libro,
termina por estrechar las últimas manos,
creerás que has sido muy relevante
y que los relatos son únicos,
majestuosos y eternos.
Vociferarás a los desconocidos
y tus amigos no estarán esperando,
porque cuando alcances al final,
solo verás la nimiedad de tu lucha,
lo estúpido de tus conquistas
y lo ignorado de tu proceso.
Cuando llegues al epílogo del libro,
escribe una tenue despedida
y deja de pensar en lo que atrás queda.
Fue solo una canción perdida
entre infinitas voces ahogadas,
en un coro de personas sin rostro
*Juan Carlos García-Ojeda Lombardo.
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