Claustro Poético

Boletín virtual de poesía, edición trimestral. Nº 46. Otoño-2016

Asociación Cultural Claustro Poético

 

  Director: Juan Carlos García-Ojeda Lombardo

  Coordinador: Juan Antonio López Cordero

D.L. J-309-2005

ISSN 1699-6151

CONSEJO DE REDACCIÓN

Poemas

Otro bulanico

Sería mejor que acabase pronto

Conmigo

Quiero

Regreso al infierno

Mansiones del alba

Soneto XXXVI

Soneto XXXVII

El pescador de perlas

Las vidas asombrosas

Por quitarle a la muerte tu soberbia

Para un torero

Búsqueda en un territorio de autosuficiencia

El odio nos deshumaniza

El rostro de Dios es un rastro de amor

Mientras Dios nos ama, nosotros nos repudiamos

Otro naciente año para amar

Pertenecer al corazón de Jesús con espíritu teresiano

Sé que cohabito en perpetuidad trascendiendo


Colaboraciones

Cantera


Noticias

Premios de poesía Otoño 2016


Colaboran en este número

 


Nos anteriores

 

Año Primav. Verano Otoño Invier.
2005 0 1 2 3
2006 4 5 6 7
2007 8 9 10 11
2008 12 13 14 15
2009 16 17 18 19
2010 20 21 22 23
2011 24 25 26 27
2012 28 29 30 31
2013 32 33 34 35
2014 36 37 38 39
2015 40 41 42 43
2016 44 45    

 

 

Conmigo*


 

Alguna vez soy yo mismo aquel que está conmigo.
Me reconozco sobre todo en las noches, cuando quedo solo.
Sé que en algún sitio estoy, que habito en alguna casa.
Sé que de algún lugar he llegado, que vine de cierto paraje perdido.

Soy uno, y sigo vivo. Tengo nombre y un número de teléfono que quizá sirva para algo
Para cada persona del mundo llega el inesperado frescor del frio invierno;
y este helor que me aletarga es mi íntima, como muerte mental,
como licor y droga adormidera que me invade sin sombras.

Yo…, soy yo. Y alguna vez…; ¿lo soy?
Otros muchos que llevo dentro, otros tantos que se incuban; en mí se adormecen.

Cuando miré fuera el corto día, y buscaba compañera en los polvorientos espejos;
te llamaba a ti, lejana consorte; signo mío, barro apretado, escarcha….

Soy solo yo, aquel que me domina,
“ese” que camina errante cansado de sí mismo y se reconoce pues, ajeno.
Aquel, que desconociéndole, le extraño a veces sin saber qué decirle.

Y soy yo, aquel que tan suyo, eternamente se queda conmigo para siempre…
              

 

                 *Josep Esteve Rico Sorgob.

 

Envíanos tus poemas