CAPITULO III

2.3. Actividad Industrial.

La actividad industrial de un pueblo pequeño como Pegalajar es de suponer que, a lo largo de su historia, nunca ha tenido una envergadura notable; generalmente se ha limitado a las posibilidades de la población existente en cada momento, y a la elaboración de los productos agrarios del término; o sea, una actividad industrial escasa, de tipo agrario, sin miras a una importación de materia prima y posterior exportación de un producto elaborado. Por otra parte, la ausencia de una mentalidad empresarial emprendedora y de capital complementan un circulo en el que todavía vive inmerso este pueblo.

A mediados del siglo XVIII existían en Pegalajar:

- 9 molinos de aceite, cuyos dueños eran: el Colegio de la Compañía, el Concejo de esta Villa, Rodrigo Cabanillas, Juan Fernández Aranda, Francisco Cabanillas, Luis de Valenzuela, Blas Contreras, Manuela de Espina, y Lucas Charte (vecino de Jaén).

- 4 molinos harineros pertenecientes: al Convento de Santa Clara de Jaén, Felipe Contreras, Fray Antonio Mexía, y a los Niños Expósitos de Jaén. Los dos primeros molían con agua de la Fuente Vieja, y los dos últimos con la del Río Guadalbullón.

- 5 hornos de pan. - 19 colmenas. - 1 carpintero. - 1 albañil. - 2 zapateros.(216)

En la primera mitad del siglo XIX la población está en pleno crecimiento, pero Pegalajar sigue siendo un núcleo pequeño, con una economía básicamente agrícola; de ahí que en una encuesta de 1821, el Ayuntamiento conteste a la pregunta de si hay alguna industria con estas palabras: "No hay ninguna que merezca la atención, porque todos los habitantes están dedicados a la agricultura" (217). En esta época la actividad industrial es semejante al siglo pasado, destacando los 11 molinos de aceite y 4 de harina (218).

En 1848 existían 13 molinos aceiteros y 5 harineros, muchos de ellos movidos por el agua del estanque de la Fuente de la Reja (219). Las demás actividades industriales eran las corrientes de un pequeño núcleo de la población. En 1.811, las realizaban 3 albañiles, 1 herrero, 10 panaderos, 3 carpinteros y 5 zapateros (220).

Con el crecimiento de la población, la actividad industrial en Pegalajar fue aumentando de volumen. En 1855 y 1863 era la siguiente:

1855 1863

Herrero 1 1

Carpintero 2 4

Sastre 1 1

Panaderos y hornos de pan 11 8

Molinos aceiteros 15 18

Molinos harineros 9 8

Zapateros 2 (221) 2 (222)

Los molinos aceiteros, que existían en 1863, tenían 33 prensas. Estos molinos solían ser de viga y estaban dotados de dos hombres y un mulo. La jornada laboral de los molineros solía ser de 12 horas. Los 8 molinos de harina de 1863 tenían 14 prensas. Estaban movidos por rodeznos o ruedas de eje vertical y producían dos fanegas por cada siete horas de trabajo. Funcionaban durante 273 días o más al año. Su funcionamiento se debía a la presión ejercida por el agua de la Presa (223).

Los molinos aceiteros también utilizaban el agua de la Presa, de ahí que se ubicasen en lugares aptos para su obtención, como los de la Calle Tercias, el situado frente al pilar de Santa María, el del Relex y otros existentes en esta época (224). EL agua era utilizada en gran cantidad y a elevada temperatura para facilitar la extracción del aceite de la masa molturada por los rulos.

Las actividades industriales fueron creciendo a medida que avanzaba el siglo XIX. Estas eran las siguientes:

1900 (225) 1930 (226)

Molinos

- de represa 5 -

- de palanca 2 -

Zapatero 3 2

Sastre 1 1

Sillero 1 -

Herrero 3 2

Carpintero 2 5

Albardero 1 -

Alambique 1 -

Fábrica de Jabón 1 1

Fábrica de yeso 2 (227) 1 (228)

Confitería 1

Horno 6

Fábrica de electricidad 1

Fábrica de gaseosas 1

Prensas hidráulicas: - con motor 8

- a mano 2

- con grúa 1

- de rincón 3

- de viga 7

Una industria polémica fue la fabrica de extracción de aceite de orujo. En 1929, Lucas León, Luis Siles Ruiz, Lucas Gómez y Gaspar Espinosa solicitaron permiso al Ayuntamiento para instalar en el sitio "Eras del Caño de la Presa" esta fábrica, pues necesitaban para la refrigeración de las calderas una porción de agua del embalse de la Fuente de la Reja, la que sería devuelta una vez usada. El Ayuntamiento denegó la solicitud basándose en el informe del Jefe de Inspección de Fábricas y Talleres de la Provincia, que informó del peligro de instalación de una fábrica de este tipo dentro del casco de la población (229). Más tarde, en 1932, fue concedido el permiso para dicha instalación "por el método del sulfuro de carbono", en un edificio de José Valverde Pérez, a unos 100 m. de las viviendas (230). Vino a justificar lo peligroso de esta fábrica la explosión de una de las calderas. Su vida no fue muy larga. Fue incautada durante la Guerra Civil y en 1937 abandonada por su mal estado (231).

Después de la Guerra, las industrias más importantes del Pueblo, las fábricas de aceite, comenzaron a modernizarse mediante la introducción de nuevos sistemas de prensas. Se pasará paulatinamente del antiguo sistema de viga al sistema de torrecillas o rincón, y finalmente al de prensa hidráulica (232).

El primer paso fue conseguir el acceso de los camiones a aquellas fábricas donde no podían llegar. Este era el caso de la fábrica aceitera Santa Victoria, cuyos propietarios eran Lucas Gómez Gámez, Manuel Ruiz Espinosa, Juan Sedeño González, Juan Manuel López Lucena y Pedro Antonio Cordero García; la de San Francisco, propiedad de Gregorio Chica Siles; y la llamada San Luis, propiedad de Emilio Gómez Medina y sus cuatro hermanos. Todas ellas estaban situadas en el sitio de las Albercas, dedicándose "a molturar aceituna de casi exclusivamente pequeños propietarios, que todos los años ven perjudicado el valor de su cosecha al desquitarle el almacenista mayores gastos de transporte por no poder los camiones, que se llevan las cosechas, llegar hasta la misma fábrica"; por ello intentaban que el Instituto Olivarero, dependiente de la Diputación Provincial, les subvencionara el ensanche (233).

Otro tipo de industria que se desarrolló en gran escala durante estos años fue la del esparto. Era la fuente de vida de muchas familias de jornaleros, hambrientos y necesitados. A pesar de las dificultades de obtención de la materia prima, esta industria artesana siguió adquiriendo un notable auge (234). El Ayuntamiento intentó regularizar la situación de la industria espartera, intentando con la ayuda de la Diputación formar un fondo para conseguir crear un servicio regulador que se encargara de proporcionar materia prima y dar salida al producto elaborado. El motivo principal venía dado por la crisis de trabajo existente (235).

Llegó a crearse la Cooperativa Espartera Virgen de Gracia, que por diversas circunstancias, entre ellas la falta de apoyo económico, desapareció (236). Para solucionar el problema de la materia prima se intentó que los montes de municipio --500 Has. en la Dehesa de Bercho y 500 Has. en los montes concertados con el patrimonio forestal del Estado-- fuesen utilizados para la producción de esparto. A través de esta industria, el Ayuntamiento consideraba que los 500 hombres en paro podían ser empleados durante 240 días al año, 300 en la elaboración de suelos de alpargatas y 150 en la producción y fabricación de cubiertas, sogas, espuertas, etc.; junto con 225 mujeres en los trabajos de terminación de alpargatas. Pero para poner en marcha esa industria se necesitaban en aquel tiempo 5 millones de pesetas (237), y no hubo donde encontrarlos.

Con el paso de los años, las actividades industriales poco habían cambiado en Pegalajar. Las nuevas industrias son pequeñas, de tipo familiar y la mayoría tienden a desaparecer a los pocos años de ser creadas; mientras permanece la idea de que la mejor inversión es el campo. Esta mentalidad es, en parte, la culpable de la creciente despoblación que desde la postguerra está afectando a Pegalajar (238).

En 1963, las actividades industriales eran las siguientes: (239)

Granja avícola 1 Molinos harineros 2

Molinos piensos 1 Fábrica aceite particular 9

Fabricas de pan 9 Fábrica aceite cooperativas 3

Fábricas de polos 1 Fábrica de cajas y embalajes 1

Herrerías 3 Zapatero reparador 4

Fábricas de hielo 1 Carpinterías mecánicas 5

Fábricas de gaseosas 1 Fábrica de electricidad 1

Guarnicionería 1 Fábrica de yeso 1

Fábrica de jabón 1

Como vemos, surgen nuevas industrias: fábrica de hielo, de polos, de jabón, de cajas y embalajes, granja avícola,...; pero realmente pertenecen, como las demás, al tipo de industria familiar que antes hemos referido, y todas ellas, excepto al granja avícola, desaparecerán a los pocos años. Sólo las fábricas de aceite continuarán como industrias sólidas, pero disminuyendo en número por la modernización tecnológica. A pesar de todo, muy pocas fábricas de aceite sabrán adaptarse en los años siguientes a las circunstancias de la época. La falta de visión de empresa moderna y emprendedora tiene su más típico ejemplo en la existencia de tres cooperativas de aceite (Perpetuo Socorro, la Purísima Concepción y Nuestra Señora de las Nieves), hace muy poco reducidas a dos, perdidas en continuos recelos e incapaces de unirse en una empresa común a lo largo de muchos años. Hoy existe una voluntad de unión, que puede quedar plasmada en un futuro próximo en una nueva y moderna cooperativa, en aras de una mayor competitividad.

Otro tipo de industrias son las canteras de piedra, que solo durante un tiempo muy determinado han estado en funcionamiento, normalmente coincidiendo con obras en las carreteras, como han sido la histórica del Mercadillo, la del cerro de la Condesa y la del Moroche (240). Función diferente ha tenido la cantera del Huerto Francés, cuyo fin es triturar la roca caliza para pintura.

Otras industrias no llegaron a instalarse en Pegalajar. En ello probablemente influyeron las deficientes comunicaciones, pese a la voluntad municipal que ofrecía toda clase de beneficios, como en 1966, cuando la fábrica "Karabell S.A." solicitó solar para su ubicación en el sitio del Cercadillo, concediéndole los beneficios de luz y teléfono en la puerta y tres casas a bajo alquiler (241).

La más reciente estadística presenta la siguiente distribución industrial en Pegalajar:

Nº empresas Trabajadores

- Industria Básica:

Producción, transportes y

distribución de energía... 1 4 Fabricación materiales construcción... 1 1 - Industria Metálica:

Carpintería metálica... 1 1

Talleres mecánicos... 1 3

- Construcción:

Edificación y obras públicas... 1 1

Construcción de inmuebles... 74 135

Instalación, montaje y acabado de

edificios... 6 11

- Manufacturas:

Alimentación:

Fabricación de aceite... 7 16

Panaderías 2 4

Textil y confección:

Fabricación géneros de punto... 1 2

- Industria maderera:

Fabricación artículos de junco,

cañas, cestería, etc.... 1 1

Industria del mueble de madera... 2 8 (242)

Hoy día se piensa que el futuro industrial de Pegalajar pasa por la futura autovía que ha de cruzar parte del término municipal. En sus proximidades hay proyectado un polígono industrial que pueda ofrecer facilidades de implantación al capital exógeno. También entre los futuros proyectos figuran la participación de almazaras en la denominación de origen, el proyecto de creación de una granja escuela y la implantación de industrias del mueble de madera --actualmente son muchos los vecinos de Pegalajar que se desplazan a Mancha Real a trabajar este tipo de industrias.